El expresidente de EE.UU. anunció que su gobierno impulsará el desarrollo de un sistema avanzado de defensa antimisiles aéreo y espacial, conocido como “Cúpula Dorada”. Este proyecto empleará una red de satélites y armamento espacial para interceptar posibles ataques balísticos.
La Oficina de Presupuesto del Congreso estima que la implementación y operación de este sistema podría alcanzar un costo de 542 000 millones de dólares en las próximas dos décadas, lo que supondría una presión adicional sobre el déficit fiscal estadounidense.
Trump, acompañado por el secretario de Defensa Pete Hegseth en el Despacho Oval, afirmó que la “Cúpula Dorada” será capaz de neutralizar misiles provenientes de diversas regiones del mundo e incluso desde el espacio. “Será el mejor sistema jamás construido”, aseguró el exmandatario.
El anuncio ha generado reacciones internacionales. China ha expresado su preocupación, señalando que el proyecto podría afectar la estabilidad global. “Urgimos a Estados Unidos a que abandone el desarrollo y despliegue de este sistema de defensa”, declaró la portavoz de la cancillería china, Mao Ning.
Según el jefe del Pentágono, Pete Hegseth, el escudo antimisiles tendrá la capacidad de interceptar misiles de crucero, balísticos e hipersónicos, además de drones convencionales y nucleares.
El contexto internacional también influye en la decisión de fortalecer la defensa estadounidense. Según la última evaluación del ejército de EE.UU., Rusia y China han avanzado significativamente en el desarrollo de misiles balísticos e hipersónicos, lo que representa un desafío estratégico para Washington.